Resumen
NOTAS DESTACADAS
La producción mundial de cereales totales (trigo y cereales secundarios) en 2024/25 se estima en 2.315 m. de t. La sequedad localizada ha mermado en cierta medida las perspectivas para la producción de trigo en Australia y Argentina al iniciarse la recolección de las cosechas principales de invierno. Aunque se han recortado también las estimaciones para la UE y Rusia, las reducciones se ven compensadas por el aumento de las proyecciones para otros varios países, entre ellos Kazajstán (trigo) y Turquía (cebada), por lo que la previsión para la producción mundial de cereales no se ha modificado desde el mes pasado. Debido casi exclusivamente al incremento de la proyección para la demanda destinada a piensos, la previsión para el consumo total se ha elevado en 3 m. de t. a 2.328 m. Teniendo en cuenta unas reservas iniciales más voluminosas de lo esperado, la estimación para las existencias remanentes mundiales (conjunto de campañas locales de comercialización) se ha aumentado en 3 m. de t. a 584 m. La previsión para el comercio se ha rebajado en 2 m. de t. a 419 m., al recortarse las proyecciones para la importación de trigo (sobre todo por parte de Turquía), maíz (China) y cebada (China, Irán).
Con proyecciones algo más elevadas para los productores de Sudamérica, se prevé ahora que la cosecha mundial de soja registre en 2024/25 un aumento interanual del 7%, elevándose así a un nuevo máximo histórico; la estimación se ha incrementado en 2 m. de t. desde septiembre. Con unas reservas iniciales más voluminosas, la previsión para las existencias mundiales al cierre se ha aumentado en 4 m. de t. Ante la expectativa de unas compras más cuantiosas por parte de varios importadores tanto en África como en Asia, la proyección para el comercio se ha incrementado en 1 m. de t. desde el mes pasado (+1%).
Dado el aumento esperado de la producción en 2023/24, la proyección para las existencias mundiales de arroz se ha incrementado en alrededor de 2 m. de t. (+1%). La previsión para el comercio en 2024 se ha elevado en 1 m. de t., para situarse en torno a 54 m. (+3%). Con la mejora de las perspectivas en la India, la estimación para la producción mundial en 2024/25 se ha aumentado en 3 m. de t. desde septiembre, alcanzando así una cifra sin precedentes de 531 m. (+2%); como consecuencia, se han incrementado las proyecciones tanto para el consumo como para las existencias. Tras el levantamiento de algunas restricciones sobre la exportación, la previsión para la demanda mundial de importación en 2025 se ha aumentado en unos 2 m. de t.
Con una evolución dispar de sus componentes principales, el Índice de Cereales y Oleaginosas (GOI) del CIC ha perdido algo de terreno desde el mes pasado.
Pese a la modesta caída prevista de la cosecha de maíz, se espera que la producción mundial de cereales totales se incremente en 2024/25 en 9 m. de t., para situarse en una cifra récord de 2.315 m. Se prevé que la oferta de cereales totales experimente un ligero descenso interanual, debido al nivel algo más ajustado de las reservas iniciales. El consumo mundial podría aumentar en 11 m. de t. para alcanzar un máximo histórico de 2.328 m., correspondiendo los mayores incrementos a la demanda destinada a alimentos y usos industriales. Cabe esperar que las existencias al cierre disminuyan en 12 m. de t. a 584 m., su cifra más baja en 10 años. La caída se atribuye al descenso interanual de las existencias tanto de maíz (en 7 m. de t.) como de trigo (en 6 m.); el recorte se verá compensado en cierta medida por el aumento de las reservas de otros cereales secundarios (y sobre todo de avena y sorgo) en 1 m. El comercio mundial podría disminuir en 36 m. de t. respecto al máximo registrado la campaña pasada, para situarse en 419 m.; destacará la caída de los envíos de trigo y maíz.
Ante la expectativa de unas cosechas abundantes en los principales productores, se espera que la producción mundial de soja experimente en 2024/25 un aumento interanual del 7%, para situarse en un nuevo máximo histórico. La elaboración se verá favorecida por la creciente demanda desde los sectores de piensos, alimentos y usos industriales, por lo que el consumo mundial podría crecer en un 5%; también se prevé que las existencias mundiales se eleven a una cifra sin precedentes. El comercio podría alcanzar un volumen récord de 179 m. de t. (+1%), destacando de nuevo unas compras superiores a la media por parte de China. En cuanto a los exportadores, es previsible que aumenten los envíos tanto de Estados Unidos como de Brasil.
Consolidando el aumento de la campaña anterior, es previsible que la producción mundial de arroz se incremente en 8 m. de t. en 2024/25, para situarse en un máximo histórico de 531 m., con cosechas más abundantes en los mayores exportadores. Favorecido por la creciente demanda alimentaria, se espera que el consumo se eleve a una cifra récord; también se prevé cierta acumulación de reservas, sobre todo en los proveedores principales. La demanda mundial de importación podría alcanzar en 2025 un nivel sin precedentes gracias a una mayor demanda en África, mientras que los envíos desde la India podrían superar los 20 m. de t. al flexibilizarse las restricciones sobre el comercio del arroz blanco no basmati.
La producción mundial de guisantes secos podría crecer por tercer año consecutivo (+3%), ya que las cosechas más abundantes en Canadá y la UE compensarán con holgura el descenso de la producción en Rusia. Dada la oferta más amplia, cabe esperar un nuevo aumento del consumo mundial, que a su vez dará lugar a cierto descenso de las existencias (-6%), pese al incremento de las reservas de los exportadores principales. Tras el crecimiento sólido de los últimos dos años, es previsible que el comercio disminuya en un 12% en 2025, debido a la caída notable de la demanda en la India.
RESUMEN DE MERCADOS
El GOI del CIC ha retrocedido ligeramente a lo largo del último mes, dado que el descenso de los precios de exportación tanto del arroz como de la soja compensó con holgura la subida de los precios de los cereales.
El sub-Índice de trigo del GOI del CIC ha ganado un 2% durante las cuatro semanas desde el informe del mes de septiembre, apoyado más que nada por la subida de los precios fob en la región del Mar Negro, al introducirse en Rusia algunas restricciones sobre la exportación.
El sub-Índice de maíz del GOI del CIC registró un avance neto del 3%. Se apreciaron tendencias dispares en los proveedores principales; el ritmo más bien lento de venta por parte de los productores contribuyó a la escalada de los precios tanto en Sudamérica como en Ucrania.
Al relajarse en la India las restricciones sobre la exportación de variedades blancas no basmati, el sub-Índice de arroz del GOI del CIC experimentó una caída notable, perdiendo un 7% a lo largo del mes.
El sub-Índice de soja del GOI del CIC registró una caída neta del 3%, presionado por unos indicadores fundamentales cada vez más bajistas.